Café por Elas
Análisis del grano
Datos de cata
Densidad del grano (0.753)
Actividad de agua (0.542)
Sobre la finca
Fincas de la Serra do Cabral
Café por Elas – Ecoagricola es una iniciativa que coloca a la mujer en el centro de la caficultura brasileña. Más que un proyecto de café, es un movimiento que busca reconocer, visibilizar y fortalecer el liderazgo femenino en un sector históricamente dominado por hombres.
Las fincas participantes, ubicadas en la zona central de Minas Gerais, son propiedades familiares con tradición cafetera de varias generaciones que han dado un paso adelante: hoy las mujeres no solo participan en la recolección o el beneficio, sino que dirigen la gestión agrícola, toman decisiones estratégicas y lideran la innovación en procesos y calidad.
Se cultivan variedades como Catuaí, Mundo Novo y Bourbon, trabajadas con procesos naturales, honey y fermentaciones experimentales, siempre buscando cafés de especialidad con perfiles diferenciados y complejos. Pero detrás de cada taza hay una historia aún más poderosa: la de mujeres que, a través de este proyecto, encuentran un espacio para empoderarse económicamente, capacitarse técnicamente y posicionarse como referentes en el mercado internacional.
Además, Café por Elas impulsa prácticas de sostenibilidad, preservación ambiental y responsabilidad social, demostrando que el liderazgo femenino puede ser también motor de cambio comunitario y regeneración del entorno.
En conjunto, representa una nueva generación de fincas brasileñas donde la calidad y la sostenibilidad se unen a un valor diferencial: el poder transformador de la mujer en el campo.
Sobre la región
Esta región cafetera se ubica en el corazón de Minas Gerais, en la franja que conecta el Cerrado Mineiro con la Chapada de Minas. Sus cafetales se desarrollan en altitudes que van de los 800 a los 1.400 msnm, con suelos fértiles y un clima marcado por estaciones bien definidas: lluvias en verano y sequedad en invierno, lo que favorece una maduración uniforme de las cerezas y una cosecha más controlada.
Los cafés de esta zona central combinan lo mejor de ambos mundos: la consistencia, cuerpo redondo y dulzor clásico característicos del Cerrado, junto con la diversidad de microclimas, acidez brillante y matices frutales y florales que aporta la Chapada. El resultado son perfiles sensoriales versátiles, capaces de ofrecer desde tazas equilibradas y chocolatosas hasta microlotes más complejos y expresivos.
Además, es un territorio donde la tradición cafetera convive con la innovación: muchas fincas familiares están apostando por procesos diferenciados, prácticas sostenibles y proyectos sociales que buscan dar mayor protagonismo a las mujeres productoras, como es el caso de Café por Elas.